Páginas

miércoles, 27 de octubre de 2010

Mercadillo del morbo


“… engullido por una noctiluca gigante. Esta noche rezaremos por tí Muffo, mañana desafortunadamente será otro día.” (leído en Desafortunadamente el sol).

 Desde luego ¿qué peor fin puede temer una persona?, y sin embargo cualquier tipo de horripilante muerte sería preferible a tener que compartir un solo día al lado de este ex alcalde de Kittim (condado de Konso). Para dibujar este tira me basé en un vídeo casero que utilizó este patético politicastro para “venderse” en una agencia matrimonial que todavía hoy existe y cuya propietaria, ahora en aprietos económicos, hizo caja hace un par de semanas en lo que ella acertó en llamar el “mercadillo del morbo”. Gasté 1,75 € en comprar aquella cinta y puedo decir sin miedo a equivocarme, que es el euro setenta y cinco mejor empleado de la historia.


lunes, 25 de octubre de 2010

En cualquier momento, autolinchamiento.


El sábado por la tarde me encontraba ante el ordenador revisando mis correos electrónicos y sin saber cómo, me arreé tres fuertes puñetazos en la cara. Como aquello no resultó de mi agrado decidí compensar semejante anomalía con algo que me dejara mejor recuerdo de un día tan devastador. Dediqué parte de lo vespertino y lo nocturno a dibujar una nueva imagen para el perfil del blog.



Una vez terminada la faena se me ocurrió que una tortilla francesa con atún resultaría una merecidísima cena, pero no pude terminar de prepararla ya que me sorprendí a mí mismo propinándome otro par de puñetazos e insultándome con cierta gravedad. Lo dejé todo y corrí hacia al estudio a hacer algo que compensara toda aquella amargura. Cinco autopuñetazos en una jornada eran más que suficientes para mí. Cogí los aperos de dibujo, senté el trasero con esmero, pensé en Andrés Iniesta (todavía no se porqué) y versioné el dibujo anterior simpsonizándome por los cuatro costados.



Ciertamente creo que en ambos dibujos mi rostro refleja el perruno estado de ánimo en el que me encontraba aquel “puñetero”día.

viernes, 22 de octubre de 2010

Dibujando cómic con la espalda agradecida.

Normalmente el hombre es contradictorio, voluble y caprichoso pero si juntamos a tres hombres el resultado puede ser... esta tira cómica por ejemplo. Quisicosa es una simpática palabra que define en cierto modo la situación protagonizada por estos tres zarramplines ávidos de todo y de nada a la vez. ¡Que bien tuvieron que dormir esa noche! ¡angelitos! 





Este mini cómic es la primera obra hecha en mi nueva mesa de trabajo, traída directamente de los EE.UU. tras mucho papeleo, trámites y gestiones de lo más variopinto. Todo el esfuerzo ha valido la pena sin embargo, es muy versátil, cómoda, con un diseño muy atractivo y a muy buen precio (aunque cuesta más traerla de allá que comprarla). Vamos, que estoy enamorado de ella, se me nota en la cara y sobre todo en la espalda. Chipén.





lunes, 18 de octubre de 2010

Rebuscando en lo recóndito. Volumen I

Dicen que tiene suerte el que la encuentra, no el que la busca. Esta mujer apareció entre mis pensamientos hace tiempo, sin contar con ello. Menuda suerte la mía. No sé a que se dedica ni que es lo que busca, parece vestirse visceralmente, a golpe de pura improvisación. Lo único que tengo claro es que de un encontronazo con alguien se le deben haber caído las gafas porque no lleva. Yo la llamaré "Fernanda y sus apellidos".

lunes, 11 de octubre de 2010

¡Hasta en la sopa ya en 1957!

Año 1934, el gobierno peruano nacionaliza la llama y Australia hace lo propio con el koala. En 1957 la familia Plimsoll, formada por madre peruana y padre australiano, decide encargar a su hijo menor, la recuperación de parte de las riquezas que la nacionalización de sendos iconos patrios ha usurpado a los emporios económicos familiares. El chico se pertrecha de una máscara y una escopeta e irrumpe con decisión en la primera oficina bancaria que aparece en su camino. Esta sería una instantánea de los hechos acontecidos tomada por una cámara de seguridad, si hubiese existido tal cosa en aquel momento.






viernes, 8 de octubre de 2010

¡Lasaña inacabada!

Suceden continuamente cosas como estas; un tipo coloca una apetitosa langosta entre dos rebanadas de pan de molde y algo no pega; niñas de nueve años jugando a las casitas con alienígenas extraviados, tampoco pega. Lo he visto con mis propios ojos, fueron hechos tan absurdos como inspiradores y los resultados no se han hecho esperar.

¡La pieza ha encajado al fin!

Aquí estoy encajado en mi sitio, el que me corresponde, mirando desde las alturas el estado de la cuestión. ¡Ay, si yo supiera cual es mi cuestión entre todas ellas!. Mientras tanto dibujaré y escribiré lo que se me antoje hasta que se me aclaren las ideas. Y son muchas y algunas buenas.

Si alguien te insiste en crear un blog dile que que estás en contra de la esclavitud del ser humano. Y no se trata de la tuya por tener que actulizarlo, si no de los demás, porque al descubrirlo se verán atraidos compulsivamente a visitarlo. ¿Será este el caso?